Sabiduría Zen

Sabiduría Zen


Un joven estudiante de Zen visitó a su Maestro, y queriendo impresionarle con su afán de conocimiento le preguntó:
-Maestro, tengo una ira ingobernable que me domina. ¿Cómo Puedo curármela?
-Tienes una cosa muy extraña- respondió el Maestro.Quisiera verla.
-Ahora mismo no puedo enseñartela - contestó el estudiante.
-¿Y cuándo me la puedes enseñar? - pregunto elMaestro.
- Me viene de repente - explico el estudiante.
- Entonces - concluyó el Maestro- no es de tu propia naturaleza.Si lo fuera, podrías enseñármela en cualquier momento.Cuando naciste, no la tenías; y tus padres no te la dieron.Date cuenta que viene de algún lugar que no forma parte de ti.Piénsalo bien.

Conclusión: 
La ira no forma parte de nuestra naturaleza. A pesar de ello, nadie está libre de ella. 
Es una fuerza poderosa que surge de forma instantánea desde lo más profundo de nuestro interior.Surge desde nuestro Ego y es proporcional al mismo.
Creerse libre de ella, es estar expuesto a que aparezca en cualquier momento, porque el Ego sólo puede ser controlado en breves lapsos de tiempo.
La ira nace del deseo y de su consecuencia: la frustración.
La mejor manera de entenderla es aprendiendo a canalizarla.
Debes saber que nada es algo por sí mismo, sino la aplicación que se hace de ello.
Por ejemplo un bisturí no es ni bueno ni malo, puede ayudar a curar o matar.
La ira puede salvarte en momentos determinado que la necesites para defenderte o otras romper relaciones que podrían haber durado toda la vida.
Que la Luz de la sabiduria guie tus actos.Solarenlo




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